Lo aceptamos, somos muy pero muy fans de los festejos del Piojo Herrera, quien no sólo ha cautivado a los mexicanos, sino a los aficionados de todo el mundo que sólo esperan que anote la Selección Mexicana para divertirse con sus ataques de euforia.
Aunque muchos lo critican, hay quienes lo consideran el técnico más efusivo y carismático de la Copa del Mundo. Le bastaron tres juegos para ser toda una celebridad a nivel mundial y que muchos medios le dediquen espacio tanto a su trabajo en la dirección técnica como a sus gestos y reacciones cuando sus dirigidos anotan gol.