Si he de ser sincero, las notas celestiales del Blue Oyster Cult llegaron a mi debido a la asombrosa selección musical realizada para la película "Heavy Metal", cuando en desacuerdo con el cine actual y el asco que me evocan los efectos computarizados miraba las películas de "antes", películas de culto.
El Blue Oyster Cult se escucha como se debería oír el autentico rock. Simplemente la combinación de notas, sonidos, las voces y las colaboraciones de Patty Smith, hacen de sus canciones piezas magistrales cuya esencia parece imposible de repetir, sin embargo una tras otra irán apareciendo las pistas de su álbum "Agents of fortune" solo para rozarte el alma y gritarte al oído, una y otra vez, que la genialidad musical también engendra piezas de Rock n Roll. Sin miramientos me atrevo a decir que esta es la mejor banda de "Hard Rock" de todos los tiempos —por ponerle algún genero, porque en realidad no lo tienen definido—. Pero quien soy yo para contárselos cuando estamos en la era del Internet, dense gusto pues con estas piezas del álbum que leen arriba (advierto que no me hago responsable del abuso de esta sustancia por parte de terceros, ni del fanatismo que el "culto de la ostra azul" pudiese llegar a generar).
El Blue Oyster Cult se escucha como se debería oír el autentico rock. Simplemente la combinación de notas, sonidos, las voces y las colaboraciones de Patty Smith, hacen de sus canciones piezas magistrales cuya esencia parece imposible de repetir, sin embargo una tras otra irán apareciendo las pistas de su álbum "Agents of fortune" solo para rozarte el alma y gritarte al oído, una y otra vez, que la genialidad musical también engendra piezas de Rock n Roll. Sin miramientos me atrevo a decir que esta es la mejor banda de "Hard Rock" de todos los tiempos —por ponerle algún genero, porque en realidad no lo tienen definido—. Pero quien soy yo para contárselos cuando estamos en la era del Internet, dense gusto pues con estas piezas del álbum que leen arriba (advierto que no me hago responsable del abuso de esta sustancia por parte de terceros, ni del fanatismo que el "culto de la ostra azul" pudiese llegar a generar).